El Movimiento de Apoyo a Siria (MAS), formado por un centenar de movimientos, organizaciones y partidos, ha presentado esta mañana, en rueda de prensa, la Conferencia “Paz y Solidaridad para Siria” que se celebrará el próximo 29 y 30 de abril en Madrid y que contará con la participación del ex director general de la Unesco, Federico Mayor Zaragoza, la escritora y ex directora de la Biblioteca Nacional, Rosa Regás, los eurodiputados de IU Javier Couso y Paloma López, el teniente alcalde de Madrid, Mauricio Valiente, el embajador de Siria, Milad Atieh, el diputado de IU Miguel Angel Bustamante, la senadora de IU Vanesa Angustias, los profesores y escritores Higinio Polo y Eduardo Luque, los abogados Enrique Santiago, Purificación de la Blanca, Willy Meyer y Manu Pineda, entre otros.

Durante dos días se hablará de soberanía, imperialismo e intervenciones en Siria, del papel del movimiento de solidaridad y, sobre todo, de la solución política y reconciliación. Este último será el tema de un panel en el que intervendrán Javier Couso, que ha viajado varias veces al país y conoce de primera mano los intentos de la negociación política, y Enrique Santiago, uno de los asesores de la FARC en el Proceso de Paz en Colombia que ha definido la hoja de ruta para acabar con una guerra de cinco décadas en Colombia.

En el encuentro con los medios, los diferentes representantes del MAS presentaron el “Llamamiento por la paz en Siria” en el que manifiestan su rechazo a “la cruenta guerra que desde hace casi seis años arrasa la República Árabe de Siria”, un conflicto que, según explicó la abogada Purificación de la Blanca, cofundadora del colectivo Ojos para la Paz, Estados Unidos ya tenía incluido en un listado de países para invadir desde el 11-M. De hecho esta declaración acusa directamente a las potencias de la OTAN y a las monarquías feudales del Golfo de haber creado y alimentado esta guerra imperialista. En concreto, ponen el dedo en Estados Unidos, Francia, Reino Unidos, Turquía, Arabia Saudí, Qatar e Israel, pidiéndoles que “finalicen su apoyo o pretendida indiferencia”.

El llamamiento se solidariza con “el pueblo sirio que sufre las consecuencias de los intereses geoestratégicos de Israel y Estados Unidos por el control de los recursos de los países de Oriente Próximo”, como son los importantes yacimientos de gas y petróleo del país, que podrían llegar a Europa a través de un gaseoducto que cruzara también Iraq e Irán. Se recordó igualmente que con esta guerra se intenta destruir el Panarabismo que representa Siria en la región y, para ello, Estados Unidos no ha dudado en romper una vez más el Derecho Internacional.

“Nos proponemos crear un amplio movimiento de oposición a la guerra en Siria para que cese la muerte, el desplazamiento y el exilio de cientos de miles de personas, para que acabe la violencia y la destrucción, para que el pueblo sirio pueda regresar a sus lugares de origen, reconstruir el país y recuperar su soberanía”, dice el llamamiento que presentó Remedios García, del Partido Comunista de España, subrayando la oposición a la injerencia en otros países y el llamamiento a los ciudadanos y organizaciones a coordinar un frente de resistencia contra la guerra y ser un altavoz de denuncia contra sus promotores.

La supresión de las sanciones contra la República Árabe Siria, sería la primera de las cuatro exigencias que reclama el MAS, junto al impulso a políticas de paz y no injerencia para defender así el derecho del pueblo sirio a decidir su propio destino. La solución de la llamada crisis de los refugiados es otro de los puntos que pide el Movimiento de Apoyo a Siria. En concreto, la necesidad de emprender conversaciones y acciones bilaterales entre los gobiernos de Siria y la Unión Europea para tratar la problemática de los desplazados sirios, con el fin de abastecerles de los medios de subsistencia necesarios y garantizarles su derecho de retorno a Siria. Y, por último, el tema de las reparaciones, exigiendo a los Estados miembros de la OTAN y sus aliados regionales las indemnizaciones necesarias para sufragar la reconstrucción del país.

Manu Pineda, activista y miembro fundador de la Asociación Unadikum, insistió tanto en la “obligación de reconstruir un país que han ayudado a destruir, como en la obligación de acoger a los refugiados. Recordó que cinco millones de sirios salen buscando refugio en Europa, que vienen huyendo de las bombas y que la mayoría quieren regresar a sus países cuando acabe la guerra. Pineda apuntó que además de crear vías seguras, habría que establecer bases diplomáticas allí para que la gente pueda solicitar asilo desde el origen.

La voz de Izquierda Unida la puso Sol Sánchez para recordar la importancia que esta organización da a las reivindicaciones encaminadas al mantenimiento y sostenimiento de la necesaria paz. Y a las cuatro reivindicaciones del manifiesto, Sánchez añadió otras propuestas para lograr los objetivos expuestos, como son la presión para que se utilicen todas las vías diplomáticas para solucionar el conflicto, acabar con el “Acuerdo de la Vergüenza” entre la Unión Europea y Turquía proporcionando vías seguras para los desplazados, y el rechazo a las bases de la OTAN, recordando que las últimas bombas arrojadas en Siria salieron de las bases que la OTAN tiene en España.

De hecho, este próximo sábado 22 de abril, a las 19:30, en Madrid, habrá una concentración ante el Ministerio de Asuntos Exteriores para exigir al gobierno español el cese de su apoyo a las políticas de intervención militar de los EEUU, la salida de la OTAN y el cierre inmediato de las bases norteamericanas desde las que lanzan sus operaciones ofensivas.