El secretario general del Partido Comunista de España (PCE), Enrique Santiago, ha reivindicado las políticas de alianzas y la unidad popular como “las más poderosas herramientas para mejorar las vidas de las personas explotadas y excluidas”. En el mitin central de la Fiesta del PCE, que se celebra este fin de semana en Rivas-Vaciamadrid y en la que se conmemora además el centenario del Partido, Santiago ha defendido el papel de la organización dentro de un Gobierno central que está impulsando medidas para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora.
El secretario general del PCE ha demandado una “más amplia unidad popular y democrática para construir un frente amplio constituyente que consolide la democracia en España y conjure para siempre el riesgo de la intolerancia fascista”, a través de una izquierda “plural y organizada” capaz de acabar “con la explotación de unas personas por otras y caminar hacia el socialismo”. Santiago ha reivindicado el mensaje de Julio Anguita, quien “nos llamó insistentemente a unirnos en torno a propuestas”.
En este sentido, ha recordado cómo, a lo largo de sus cien años de historia, la unidad de la clase trabajadora ha sido “una de las armas más poderosas del PCE”, desde “el Frente Popular que llevó a nuestro partido por primera vez a un Consejo de Ministros durante la II República”, pasando por “la unidad de los demócratas en la lucha contra el fascismo y la dictadura” o la creación de las Comisiones Obreras, hasta llegar a la “convergencia política y social en Unidas Podemos, que ha conseguido que España sea el único país de Europa donde la izquierda transformadora y las comunistas forman parte del Gobierno”.
Pero para el secretario general del PCE, “lo más importante de este centenario no es nuestra inmensa hoja de servicios por la liberación de la clase trabajadora, sino todo lo que nos queda por hacer”, ya que “es tiempo de caminar por la liberación de la mujer y su plena igualdad real, de unir a la juventud del mundo contra el cambio climático, de crear nuevos modelos productivos justos y social, energética y ecológicamente sostenibles que pertenezcan a las clases trabajadoras” y “poner a los trabajadores y trabajadoras del mundo al frente de su destino”.