Ayer lo anunciaba el BBVA y hoy le ha tocado al Banco Santander. Continúa por lo tanto el goteo de noticias sobre los indecentes beneficios conseguidos por los bancos en España durante 2022, encuadrados en una situación de fuerte inflación, de crisis en muchos sectores y de contención de los salarios para los trabajadores y las trabajadoras.

En concreto, el banco que dirige Ana Patricia Botín acaba de anunciar que también obtiene su mayor beneficio histórico, ganando 9.605 millones de euros en el ejercicio del año 2022. En total es un 18,2% más. Parte de esos beneficios se deben al saqueo del bolsillo de la ciudadanía, pues el margen de intereses subió el 15,7% y las comisiones se elevaron un 12,3% hasta alcanzar los 10.502 millones.

Esos beneficios exorbitantes han llevado al líder del Partido Comunista de España, Enrique Santiago, a declarar que «demuestran precisamente la importancia de un impuesto a estos beneficios extraordinarios”, como el impulsado por Unidas Podemos para su aprobación el año pasado y al que se opusieron férreamente la derecha y la extrema derecha.

Además, el dirigente comunista indicó que todo ello pone en evidencia también “la necesidad de incrementar las reformas fiscales para que las empresas tributen por sus beneficios igual que lo hacen las personas físicas, porque en este país hay una diferencia abismal”.

Para el también portavoz adjunto de Unidas Podemos, una situación así debe llevar “a que se revise la política hipotecaria” y “aprobar la Ley de Vivienda, porque no se pueden dar estos beneficios exorbitantes a costa de cobrar intereses exagerados a las familias españolas”. Las palabras de Enrique Santiago coincidieron con la propuesta lanzada por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para congelar los tipos de las hipotecas, cuya subida lleva a la banca a conseguir esos abultados beneficios.